Hoy es sábado santo y en todas las iglesias católicas del mundo tiene lugar lo que se conoce como "Vigilia pascual", la cual es considerada una celebración de suma importancia dentro de la fe cristiana, pues es la antesala a la resurrección de Jesús. En esta celebración además de la bendición del fuego y el agua, hay un elemento que toma notoria importancia y es la entonación del Pregón Pascual.
El Pregón Pascual, también conocido como Exultet por su inicio en latín, es uno de los himnos más antiguos y significativos de la liturgia cristiana. Su origen se remonta al siglo IV d.C., y se canta durante la Vigilia Pascual, la celebración más importante del calendario litúrgico, que conmemora la Resurrección de Jesucristo.
ORIGEN Y EVOLUCIÓN DEL PREGÓN PASCUAL
El Exultet tiene sus raíces en la tradición litúrgica romana y se ha transmitido a través de diversos textos y versiones a lo largo de los siglos. Aunque su autoría exacta es incierta, se atribuye a figuras como San Ambrosio y San Agustín.
En la Edad Media, se utilizaban rollos de pergamino ilustrados que se desenrollaban durante la proclamación, permitiendo a los fieles seguir la narración visualmente.

SIGNIFICADO Y SIMBOLISMO
El Exultet es una proclamación de alegría y esperanza. Comienza con una invitación a la Iglesia a regocijarse por la victoria de Cristo sobre la muerte. A través de sus versos, se recuerda la historia de la salvación, desde la creación hasta la redención, destacando momentos clave como el sacrificio del Cordero Pascual y la liberación del pueblo de Israel.
El himno culmina con una alabanza a la "feliz culpa", reconociendo que el pecado original fue necesario para que el Salvador viniera al mundo .
EL PREGÓN EN LA VIGILIA DEL SÁBADO SANTO
La Vigilia Pascual comienza con la bendición del fuego nuevo y la preparación del Cirio Pascual, una vela grande que simboliza a Cristo resucitado como la luz del mundo. Durante la procesión hacia el altar, se entona el Exultet, marcando el inicio de la celebración.
Este canto no solo es una expresión de alegría, sino también una meditación profunda sobre el misterio pascual y su significado para la humanidad.
El Pregón Pascual es más que un himno litúrgico; es una proclamación de la victoria de la vida sobre la muerte y una invitación a todos los creyentes a participar en la alegría de la Resurrección. Su canto en la Vigilia del Sábado Santo es un momento culminante que une a la comunidad en una celebración de fe, esperanza y redención.