Los dolores de cabeza son una experiencia común para muchas personas, pero en algunos casos, pueden evolucionar hacia una condición más crónica y debilitante: la migraña . La migraña es un tipo de dolor de cabeza intenso y frecuente que puede afectar significativamente la calidad de vida de quienes la padecen .
Aunque no siempre es posible identificar una causa específica , hay varios factores que pueden convertir un simple dolor de cabeza en una migraña crónica . Desde factores genéticos y hormonales hasta el estrés, la falta de sueño y ciertos alimentos, hay una variedad de elementos que pueden desencadenar o empeorar la migraña.

¿QUÉ FACTORES PUEDEN CONVERTIR UN DOLOR SIMPLE EN UNO INTENSO?
La migraña resulta crónica cuando el dolor de cabeza se presenta durante 15 o más días al mes , por al menos tres meses consecutivos . En esos días puedes manifestar síntomas característicos de esta patología.
Los factores que pueden convertir un dolor leve en una migraña crónica son:
- El uso excesivo de medicamentos para el dolor.
- La falta de eficacia de los tratamientos iniciales.
- Trastornos médicos coexistentes como ansiedad, depresión o insomnio.
- Estrés prolongado o cambios importantes en la vida.
Debes tener presente que el síntoma clave para detectar la migraña crónica es la frecuencia del dolor de cabeza . Si los episodios suceden con regularidad y alcanzan más de 15 días al mes, estás frente a una migraña crónica.
CAUSAS DE LA MIGRAÑA
Existen muchas causas, aunque se cree que esta patología tiene un componente genético y neurológico. Sin embargo, hay otros desencadenantes tales como: cambios hormonales, estrés emocional o físico, falta o exceso de sueño; luces brillantes, sonidos intensos o ciertos olores, cambios climáticos o presión atmosférica.
También, puede estar provocado por ciertos alimentos, como los quesos curados, el chocolate y el alcohol; y medicamentos vasodilatadores o anticonceptivos.

ASÍ PUEDES REDUCIR EL DOLOR POR UNA MIGRAÑA
La migraña no tiene una cura definitiva para la migraña , pero si tratamientos que ayudan a controlar y reducir el dolor, como:
- Medicamentos.
- Cambios en el estilo de vida: evitar problemas, dormir 8 horas y llevar una alimentación saldable.
- Remedios naturales: el uso de jengibre, aceite esencial de lavanda, compresas frías, yoga y masajes pueden aliviar los síntomas.
- Suplementos nutricionales: incorpora magnesio y vitaminas del complejo B.
- Controla el estrés con meditación, escritura terapéutica o ejercicios de respiración.