En el Informe Mundial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos, “No dejar a nadie atrás”, analiza las causas de esta exclusión y explora maneras de reducir las desigualdades.
En un comunicado conjunto, Unesco y ONU-Agua, indicó que en el informe del agua se reconocen los logros alcanzados en los últimos 15 años; sin embargo, aclaró que aún faltan condiciones para brindar acceso universal al agua y al saneamiento, sin discriminación y dando prioridad a los más desfavorecidos.
Recordó que en 2010 la Asamblea General de la ONU adoptó una resolución que reconoce que “el derecho al agua potable y al saneamiento es un derecho humano” y en 2015 el saneamiento fue reconocido como derecho independiente.
En 2015, refirió el informe, tres de cada diez personas, es decir, dos mil 100 millones, carecían de acceso a servicios seguros de agua potable y cuatro mil 500 millones, (seis de cada 10 habitantes del planeta), carecían de instalaciones de saneamiento gestionadas de forma segura.