A unos días del cambio de ministros de Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la ministra presidenta Norma Piña Hernández, convocó a una sesión extraordinaria el 19 de agosto, generando críticas desde el ámbito político, particularmente por parte de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Y es que se esperaba que ayer, 12 de agosto, fuera la última sesión con el actual equipo de ministros, antes de que los nuevos magistrados, elegidos en la elección extraordinaria del 1 de junio, asuman sus cargos el 1 de septiembre.
Sin embargo, quedaron dos asuntos pendientes de resolución se trata de una acción de inconstitucionalidad contra la reforma judicial aprobada en Yucatán en marzo y la declaratoria de validez de la elección de magistrados que ocuparán dos vacantes en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Durante la última sesión, los ministros resolvieron un recurso presentado por Morena contra reformas al Código Electoral de Coahuila, pero la jornada concluyó abruptamente luego de que el ministro Alberto Pérez Dayán se retirara, dejando temas sin resolver.

CLAUDIA SHEINBAUM CUESTIONA MOTIVOS DE NUEVA SESIÓN
Ante el anuncio de la nueva sesión, Claudia Sheinbaum expresó su inconformidad, cuestionando públicamente los motivos de la convocatoria. “¿Por qué quieren una sesión extraordinaria? A lo mejor iban a resolver los impuestos de una persona que debe mucho”, ironizó la mandataria, insinuando intenciones políticas detrás del movimiento.
Sheinbaum también advirtió que la “Corte del pasado” no debería interferir en el proceso de renovación del Poder Judicial a escasas semanas del relevo, y llamó a la transparencia sobre el objetivo de la sesión extraordinaria.
Mientras tanto, la ministra Piña aseguró que esperará la posible presentación de nuevas impugnaciones antes de formalizar el nombramiento de los nuevos magistrados, lo que podría justificar la necesidad de una sesión adicional antes del cierre de este ciclo judicial.