Navojoa y cronista municipal

Ejidos afectados por sequía

Navojoa y cronista municipal

El tema del cronista municipal de Navojoa al parecer se diluye poco a poco en el interés oficial que podría llevar a establecer el cargo en el organigrama respectivo. No se advierte ánimo o disposición para asumir la designación de un relator de los hechos más sobresalientes del transcurrir local. Pero resulta imposible no reparar también en la certeza administrativa o práctica de que deben existir otras tareas municipales más urgentes o necesarias que es preciso sean atendidas por el Gobierno Municipal.

No es tanto que la existencia formal de un cronista del rango citado signifique algo así como un cargo que esté de más o que no haga falta en un organigrama gubernamental. Quizá todo deba ser fruto de circunstancias o necesidades. También pudiera ser el caso de que una autoridad no compagine con la tarea de un cronista. Todo puede suceder y siempre estarán abiertas todas las posibilidades de interpretación para explicar el nombramiento de un responsable que ejerza la tarea a que se alude.

En el caso de Navojoa la designación de un cronista municipal prácticamente ha estado abierta o latente a lo largo de la presente administración municipal, donde nunca se ha dicho que no a la formalización de esa tarea. Pero tampoco se han marcado pasos concretos o definitivos para llevarla a su pertinente concreción. La última vez que se abordó el tema en público, pareció quedar más o menos en claro que la tarea de que se habla pronto tendría formalidad o concreción.

No ha sido así, por lo menos hasta el sábado anterior en la noche que es cuando se escribieron estos renglones. En un estado de cosas como el que se comenta, el historiador Javier Félix Gastélum planteó reconsiderar la importancia de que Navojoa cuente con un cronista que relate la historia de la ciudad. Y que también represente al municipio en eventos donde pueda proyectar su pasado.

Planteamientos como los anteriores son más que pertinentes, por lo que cabe esperar se les brinde la atención que merecen. Félix Gastélum incluso comentó que no se ha dado seguimiento a la solicitud planteada por el Congreso del Estado para que se asuma la designación del cronista navojoense. Sin embargo, por lo visto lo que cabe esperar es que cada cierto tiempo salga a relucir un tema como el que se comenta. Al menos así ha sido la mecánica ejercida hasta ahora. Pero no estaría de más asignarle mayor formalidad a la designación del cronista navojoense, sin que ello signifique menoscabo en las tareas habituales del gobierno local.

En otro tema, vale poner de relieve la difícil condición existencial por la que está pasando la población ejidal de lugares como Pueblo Mayo y Bacame, agobiada (el término parecería correctamente aplicado) por los efectos de la sequía imperante. Allí, más de dos mil integrantes de más de 10 comisariados ejidales de los dos lugares citados, que se ubican al norte navojoense, resolvieron enfrentar la situación por la que atraviesan.

Por eso, un conglomerado así está planeando endurecer sus demandas de apoyo frente a la sequía que hoy se padece. No le faltarían razones a ese sector para polarizar una exigencia de auxilio o solidaridad, dicho sea sin exageración. Por lo visto, las autoridades han prestado oídos sordos al entendimiento de esta situación, lamentable y dolorosa de suyo. Lo anterior quiere decir, en palabras llanas, que la población a que se alude no ha recibido ninguna clase de ayuda económica directa, según reveló Balvanedo Fuentes Cuén, ejidatario y líder social de Pueblo Mayo.

La ayuda de que se habla la han solicitado en varias ocasiones. Pero la respuesta siempre ha sido la misma. Nada de nada. Es posible tomar nota de la gravedad de la situación imperante citando los ejidos cuyos habitantes están ya en desesperación justificada. He aquí la lista: División del Norte, Lázaro Cárdenas, Mártires Campo 60, Pesqueira, Pueblo Mayo, Agustín Melgar y Bacame, entre otros. Todo este conglomerado se encuentra en la situación descrita.

No es cómoda dicha situación. Por eso se disponen a remontarla, lo cual es propio que hagan en una brevedad pertinente hasta donde les sea posible a sus líderes. Éstos planean marcar estrategias de presión para alcanzar los propósitos definidos. Buscan la rehabilitación sus pozos que hoy están inactivos. Definirán así algunas posibilidades de cultivo. Pagan el Impuesto Predial Ejidal. Pero no reciben ningún beneficio a cambio. Increíble pero cierto. Cuánta diferencia entre las palabras de los discursos y los hechos reales. Sin duda.

armentabalderramagerardo@gmail.com