En el marco del Día del Árbol, se vuelve oportuno recordar y reconocer el valor del mezquite, un árbol fundamental en los ecosistemas áridos de México y, en particular, una planta sagrada y medicinal dentro de la cultura tradicional yaqui.
Este árbol, además de su resistencia y adaptabilidad al clima seco, posee una rica carga simbólica y una notable utilidad terapéutica, documentada por generaciones de practicantes de la medicina tradicional yaqui y validada en parte por estudios científicos.
USOS MEDICINALES SEGÚN LA HERBOLARIA YAQUI
De acuerdo con el libro Herbolaria de la Tribu Yaqui, elaborado con la participación de autoridades de salud y practicantes de la medicina tradicional yaqui, el mezquite se utiliza para tratar una amplia variedad de afecciones físicas y espirituales. Entre sus usos más comunes están:
- Deshidratación: Se machacan sus hojas y se colocan en agua para bañarse con ella.
- Diarrea: Se prepara un jugo con hojas y ramas, que aunque amargo, es altamente efectivo.
- Fiebre: Hojas y ramas se machacan y se echan en agua, que puede tomarse o usarse en baños.
- Dolores de muela, cabeza y empacho: Preparaciones de hojas y corteza alivian estas molestias.
- Golpe de calor: La corteza blanca se infusiona y se bebe como agua de uso.
- Llagas y picaduras de insectos: La mezcla de hojas y ramas se usa para lavar el área afectada.
- Diabetes y problemas en los ojos: Las hojas tienen aplicaciones medicinales específicas.
- Problemas urinarios: Las espinas del mezquite también se emplean con fines curativos.
- Además, una mezcla popular incluye hojas licuadas con ajo y limón, que se consume durante el día como tratamiento general para fortalecer el organismo.
UN ÁRBOL SAGRADO PARA EL PUEBLO YAQUI
El mezquite no es solo un recurso médico para los yaquis, también es considerado un árbol sagrado, profundamente respetado dentro de su cosmovisión. Según la tradición, este árbol anunció la llegada de los españoles durante la época de la conquista, convirtiéndose en un símbolo de advertencia y conexión espiritual.
Se cree que el mezquite ayuda a prevenir los “males puestos”, dolencias relacionadas con desequilibrios espirituales o energías negativas. Por ello, su presencia en los hogares y rituales yaquis es común y respetada.

VALOR ECOLÓGICO, ARTESANAL Y CIENTÍFICO
El tronco del mezquite es altamente valorado para la elaboración de artesanías, la construcción de ramadas y para hacer leña. Sin embargo, en los últimos años su presencia ha disminuido, lo que ha motivado a muchas comunidades a protegerlo y cultivarlo con mayor cuidado.
Investigaciones científicas recientes han confirmado que el mezquite posee propiedades anticancerígenas, antitumorales, antifúngicas y antidiabéticas, además de favorecer la regeneración muscular tras lesiones. Su eficacia frente a hongos como Candida albicans y Cryptococcus neoformans ha sido destacada en laboratorios.
UNA PLANTA SIN TOXICIDAD, PERO EN RIESGO
A pesar de su amplia utilidad, el mezquite no es tóxico en las dosis recomendadas, lo que lo hace seguro para el uso medicinal. Sin embargo, su creciente escasez en algunas regiones del norte de México es motivo de preocupación para pueblos originarios y ambientalistas.
En este Día del Árbol, el mezquite representa un símbolo del conocimiento ancestral, la riqueza biocultural y la necesidad urgente de conservar nuestras plantas nativas, no solo por su valor ecológico, sino también por su papel en la salud y la identidad de los pueblos indígenas como el yaqui.