En México se tiene el registro de al menos 40 especies distintas de araña violinista, y actualmente se atraviesa por la temporada en la que su presencia se incrementa dentro de los hogares, principalmente en lugares oscuros y con poco movimiento, como áticos, closets y montones de madera.
La picadura de esta araña puede causar daños severos al organismo, incluyendo necrosis muerte celular inmediata del tejido, además de síntomas como enrojecimiento, dolor intenso, formación de ampollas o úlceras. Su veneno contiene una potente neurotoxina que puede resultar letal si no se trata a tiempo.
¿EXISTE UN ANTÍDOTO CONTRA LA ARAÑA VIOLINISTA?
A pesar de su peligrosidad, en México existe un antídoto capaz de contrarrestar los efectos del veneno. Se trata de Reclusmyn, una solución inyectable de 5 ml desarrollada por la empresa mexicana Laboratorios Silanes, que evita que el veneno se una a los receptores celulares y desencadene los efectos tóxicos.
El Reclusymyn fue aprobado en 2019, después de que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) suspendiera su venta en 2016 para realizar estudios sobre su efectividad y seguridad.

Actualmente, se puede adquirir en farmacias como Purex y Farmalisto, aunque su precio sigue siendo una barrera para muchas familias, pues puede superar los 16 mil pesos. En algunos casos, como el de menores de edad, se requiere una mayor dosis, lo que incrementa aún más el costo.
Ante la posible aparición de este tipo de arácnido, las autoridades sanitarias y expertos recomiendan extremar precauciones en el hogar. Se aconseja realizar limpieza frecuente en espacios cerrados o que almacenan objetos por tiempo prolongado, así como mover muebles y maderas apiladas donde suelen esconderse.
En caso de una mordedura, se recomienda lavar de inmediato la zona afectada con agua y jabón, aplicar hielo para reducir la inflamación, y acudir lo antes posible a un centro médico, donde se pueda evaluar la necesidad del antídoto.