Señaló que son los trabajadores los que se dan cuenta de estos actos de vandalismo en las tumbas y donde dijo son raros los casos donde se llegan a desenterrar restos para que queden a la vista.
"Las personas se brincan las bardas, es difícil para unos veladores que se den cuenta de muchas cosas, hay que tomar en cuenta que también hay lápidas altas que nos estorban a la vista para poder hacer mejor las inspecciones Y aunque están en constante vigilancia si son situaciones que se presentan", comentó.
Barraza Almazán mencionó que los trabajadores o incluso oficiales pueden llegar a sacar de 10 a 20 personas diariamente, las cuales se encuentran en situación de calle y que buscan abrigo o refugio los camposantos de la ciudad.
El funcionario mencionó que además se tiene vigilancia en coordinación con Seguridad Pública, por lo que debe reforzarse este rubro.
