La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró este lunes que su gobierno no ha sido notificado formalmente por Estados Unidos sobre la posible negativa a aceptar nuevas solicitudes de vuelo desde México, en el marco de un presunto incumplimiento del Acuerdo de Transporte Aéreo entre ambos países.
Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, la mandataria afirmó que no existen razones para una sanción, ya que las decisiones tomadas en materia aeroportuaria se han basado en criterios técnicos y de seguridad.
SHEINBAUM RESPONDE A LA ADVERTENCIA DE EU SOBRE VUELOS
“Fue una declaración de la Secretaría de Transporte del gobierno de Estados Unidos, todavía no hemos sido notificados formalmente. Parece que van a notificar en esta semana y hay que ver exactamente a qué se refiere”, expresó Sheinbaum. “México es soberano… no hay razón para tener alguna sanción, se privilegió la seguridad”, subrayó.
El pronunciamiento ocurre luego de que el secretario de Transporte estadounidense, Sean P. Duffy, emitiera un comunicado el sábado en el que acusó a México de rescindir franjas horarias de vuelo en 2022 sin previo aviso y de obligar a transportistas estadounidenses de carga a trasladarse al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA). Según Duffy, esta reubicación no ha traído mejoras en la congestión del Aeropuerto Internacional Benito Juárez (AICM), como se prometió, y ha provocado un aumento millonario en los costos para las empresas.
Al respecto, la presidenta recordó que la saturación del AICM fue documentada desde 2014 y que esa situación fue uno de los factores que justificaron la propuesta inicial del aeropuerto en Texcoco. Sin embargo, tras una consulta ciudadana, se optó por construir el AIFA, lo que implicó un ahorro de aproximadamente 300 mil millones de pesos, dijo.
Sheinbaum también defendió la medida de trasladar operaciones de carga al AIFA, indicando que fue una decisión soberana basada en estudios técnicos, aunque reconoció que algunas aerolíneas estadounidenses consideraron corto el tiempo de aviso. No obstante, apuntó que ya ha pasado más de un año y medio desde la reubicación, tiempo suficiente para que las empresas se adaptaran.
“¿Qué significa para todos? El que la carga se haya ido, la carga dedicada al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles”, explicó.
Ante las tensiones, la mandataria informó que existen mesas de trabajo con las Secretarías de la Defensa Nacional, Marina e Infraestructura, Comunicaciones y Transportes para abordar cualquier duda sobre el tema.
“Se privilegió la seguridad. No hay razón alguna para que tenga que haber una sanción. La decisión de hacer el aeropuerto en Santa Lucía fue una muy buena decisión. Imagínense qué hubiera pasado si se hubiera seguido con el aeropuerto en Texcoco”, concluyó.