Investigadores japoneses encontraron que la conocida hormona del amor revierte los daños de la proteína beta amiloide, causante de la enfermedad
Uno de los males más atroces y para los que aún no existe cura es el Alzheimer, que causa estragos totales en quien la padece y en quienes cuidan al paciente.
Sin embargo, un destello de luz arroja la investigación de científicos japoneses, que notaron en algunos ratones esta hormona revierte los efectos de la proteína beta amiloide, causante del mal.
Se cree que pueda ser utilizada en algunos tratamientos contra el padecimiento, pues en el cerebro normal la oxitocina se une a las membranas del cerebro, que son los receptores de dicha hormona.
Sin embargo, dentro del experimento "bloquearon" los receptores en los roedores, a fin de ver si ésta podría revertir el daño ocasionado por la beta amiloide.
Descubrieron que la oxitocina aumenta la capacidad de señalización hacia el hipocampo, revirtiendo el deterioro.
Akiyoshi Saitoh, investigador de la Universidad de Ciencias de Tokio, expuso que su estudio plantea la posibilidad de que la hormona del amor pueda ser una nueva modalidad terapéutica.
Esta va encaminada a tratar la pérdida de memoria como la enfermedad de Alzheimer y otros trastornos cognitivos.
Por ello esperan los hallazgos abran una nueva vía hacia la creación de nuevos medicamentos para el tratamiento del Alzheimer, refirió.