La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, destacó en la reunión la ingente fuga de capitales que se ha registrado en los mercados emergente ante la crisis por el coronavirus, e indicó que si los costos humanos de la pandemia del coronavirus ya son “inconmensurables”, la recesión mundial que hay en ciernes “al menos será tan mala, o peor, que la crisis financiera mundial” que estalló en 2008.
“Todos los países necesitan trabajar juntos para proteger a las personas y limitar el daño económico. El tema principal de la reunión de ayer de los ministros de finanzas y gobernadores de los Bancos centrales del G20 fue que este es un momento para la solidaridad”, dijo la mayor autoridad del FMI.
Tras anticipar que la recesión de la economía mundial será “importante”, el presidente del BM, David Malpass, pidió una moratoria del pago de la deuda oficial de los países más pobres y vulnerables, y dijo que la prioridad ahora es “proporcionar una respuesta rápida” e implementar reformas que ayuden a acortar el tiempo de recuperación y “crear confianza en que esa recuperación puede ser fuerte”.
“Los países deben avanzar rápidamente para impulsar el gasto en salud, fortalecer las redes de seguridad social, apoyar al sector privado y contrarrestar la interrupción del mercado financiero”, destacó Malpass.
AUMENTARÁN PRECIOS
A su vez, industriales advierten que por los aumentos de hasta 21 por ciento que enfrentan empresas en costo por incremento del dólar, pues sus insumos se cotizan en esa moneda, podría provocar incremento en los precios al consumidor de entre el 2 al 17 por ciento.
Francisco Cuevas Dobarganes, director general de la Unión Industrial del Estado de México (Unidem) anunció que debido a las restricciones y a los efectos de la enfermedad Covid 19, la industria ya registra algunos problemas para poder operar con normalidad derivado del deslizamiento cambiario, ya que muchos de los insumos que requieren las empresas fijan su precio en dólares, y muchos costos han tenido aumentos hasta del 21 por ciento.
Pese al estímulo monetario anunciado por la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), en el sentido de eliminar los límites de sus compras de activos, ayer lunes los índices bursátiles del mundo volvieron a retroceder, tras haber registrado su peor semana desde octubre de 2008.
PESO SIGUE EN PICADA
La inquietud por los efectos del coronavirus en la actividad económica toma fuerza en Estados Unidos, por lo que el tipo de cambio inicia al alza y los mercados presentan un sesgo negativo mientras ponderan anuncio de la Reserva Federal (Fed) y la advertencia de uno de sus funcionarios de alto nivel.
El dólar se vende a 25.30 pesos en Citibanamex, 19 centavos más que su cierre previo, y se compra a 24.25.
En los cruces realizados en el mercado de mayoreo, el tipo de cambio se negocia con un precio de adquisición de 24.85 y uno de venta de 24.90 unidades, lo que representa una variación de 13.45 centavos con respecto a la sesión anterior.
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) siguió la tendencia bajista de los mercados globales y finalizó sus operaciones de ayer lunes con un descenso de mil 305.29 unidades, para colocarse en los 32 mil 964.22 puntos, una minusvalía de 3.81 por ciento.
En los últimos 30 días, el peso se ha depreciado con respecto al dólar en un 28.30 por ciento, pasando de 19.01 a 24.39 pesos. Lo que implica que los costos de producción de algunas empresas de alimentos básicos aumenten desde el 5 hasta el 21 por ciento, dependiendo del grado de integración a las importaciones que tengan, esto quiere decir que los precios podrían aumentarse desde el 2 hasta un 17 por ciento.
“Esta situación no sería tan grave si no estuviéramos viviendo los efectos de coronavirus, que sin duda generará muchos desempleos y pérdida de ingresos a la mayoría de las familias de México”, lamentó Cuevas Dobarganes.