Por: Fabiola Navarro
Susana Ramírez Miranda salió de su domicilio un 6 de abril, de San Ignacio Río Muerto a Ciudad Obregón, para realizar un depósito en efectivo en Plaza Soriana Bella Vista. “Desde ese día a las 4:00 de la tarde, perdimos comunicación con ella”.
Desde entonces, sus hijos se han dedicado en cuerpo y alma a buscarla en hospitales y a pedir información en los sitios que visitó Susana Ramírez, y lo dieran todo para abrazarla y tenerla de regreso.
“Si me está escuchando, yo le quiero decir que la extraño mucho y a la gente que me ayude a seguir buscando; los números de teléfono a donde se pueden comunicar están en los folletos”, comentó Yoselín con un profundo dolor, como el que únicamente puede conocer quien ha perdido a una madre en esas circunstancias.
Recientemente se manifestaron de forma pacífica frente a las instalaciones de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) por la lentitud en el proceso de investigación y la burocracia que caracteriza a esa instancia.
“Ese día sí se pusieron a la orden y me dieron algunos datos, pero ya no se han comunicado conmigo”, señaló.
“Rezamos a Dios para que me la regrese con vida, eso es lo que hacemos todas las noches mis tías y mi papá. Yo me la imagino como siempre, riéndose de todo, sacándote una sonrisa, muy platicadora y muy amigable”, puntualizó.