El uso frecuente de esmaltes, especialmente en tonos oscuros, puede provocar el amarilleamiento de las uñas debido a compuestos como el formol
Por: Jhoanna Ontiveros Peraza
Seguir con las tendencias en manicura, cambiando constantemente de esmalte, se puede enfrentar a un problema estético común: las uñas amarillas. Aunque este tono puede deberse a causas más serias como infecciones por hongos o deficiencias vitamínicas, en muchos casos es el resultado directo del uso frecuente de esmaltes de color, especialmente los más oscuros.
Este efecto se debe a ciertos compuestos químicos presentes en los esmaltes, como el formol, que pueden teñir la superficie de la uña. El uso repetido de tonos como el rojo, borgoña o incluso algunos nudes intensos puede provocar que nuestras uñas luzcan apagadas y amarillentas, aún después de retirar el esmalte.
¿CÓMO EVITAR QUE LAS UÑAS SE PONGAN AMARILLAS?
Los expertos en manicura recomiendan nunca aplicar esmalte de color directamente sobre la uña sin una capa base protectora, también conocida como base coat. Este producto actúa como un escudo entre la uña natural y los pigmentos del esmalte, reduciendo el riesgo de manchas amarillas.
Además, existen bases que ofrecen beneficios adicionales como endurecimiento de uñas o efecto blanqueador, lo cual resulta útil si ya existe un daño previo. Incorporar este paso a tu rutina puede hacer la diferencia para mantener las uñas saludables y con buen aspecto.
¿QUÉ HACER SI TUS UÑAS ESTÁN AMARILLAS POR EL ESMALTE?
Si las uñas ya presentan un tono amarillento, lo más recomendable es darles un respiro de esmaltes de color. Durante este periodo, se puede usar solo bases con tratamiento blanqueador y evitar manicuras agresivas como las de gel o acrílico.
En algunos casos, cuando el daño es más profundo, la mejor opción será permitir que la uña crezca completamente para que se renueve su aspecto natural.
REMEDIOS CASEROS PARA BLANQUEAR LAS UÑAS
También se puede recurrir a opciones caseras para mejorar el aspecto de las uñas amarillas. Estas son algunas de las más efectivas:
- Limón: Su ácido natural actúa como blanqueador. Se puede sumergir las uñas en jugo de limón o frotarlas con un algodón empapado.
- Bicarbonato de sodio: Mezclado con agua o limón, se forma una pasta exfoliante que ayuda a eliminar manchas e impurezas.
- Agua oxigenada: Aplicar con un algodón durante algunos minutos puede aclarar el color de las uñas.
- Pasta dental blanqueadora: Al igual que con los dientes, ayuda a reducir las manchas si se masajea sobre las uñas.
Estos tratamientos deben aplicarse con suavidad y constancia para ver resultados, y no sustituirán una atención médica si el problema persiste o se agrava.
Mantener unas uñas sanas y bonitas va más allá de seguir una moda, también es una forma de cuidar el cuerpo.
Usar los productos adecuados, darles descanso y aplicar tratamientos naturales puede ayudarte a lucir una manicura impecable sin comprometer la salud de tus uñas.