A pesar de haber apostado fuertemente por este nuevo terreno desde 2021, la compañía ha retirado más de 21 títulos de su catálogo sin previo aviso
Por: Brayam Chávez
Netflix, la plataforma líder en streaming, ha comenzado a dar un giro en su estrategia relacionada con los videojuegos móviles.
A pesar de haber apostado fuertemente por este nuevo terreno desde 2021, la compañía ha retirado más de 21 títulos de su catálogo sin previo aviso, generando desconcierto entre sus usuarios y abriendo la puerta a nuevas preguntas sobre el futuro de su división de gaming.
JUEGOS ELIMINADOS SIN ADVERTENCIA
Entre los juegos que han desaparecido de forma silenciosa se encuentran títulos populares como Twelve Minutes, Kentucky Route Zero, Immortality, Reigns: Three Kingdoms y Before Your Eyes. Todos ellos eran juegos con un enfoque narrativo e independiente, pensados para ofrecer una experiencia más profunda y cinematográfica.
Lo que más ha molestado a los usuarios es la forma en que se ha llevado a cabo esta eliminación: sin comunicados, sin anuncios previos y sin dar opción a prepararse. Muchos jugadores que habían descargado estos títulos o estaban en medio de una partida ahora se enfrentan a la imposibilidad de acceder a ellos, ya que varios requerían soporte en línea que ha dejado de estar disponible.
¿FRACASO COMERCIAL O ESTRATEGIA DE REORGANIZACIÓN?
Desde su incursión en los videojuegos, Netflix ha invertido en estudios como Night School Studio (Oxenfree) y Next Games (Stranger Things: Puzzle Tales), además de lanzar juegos basados en series como Stranger Things, Narcos y La Casa de Papel.
Sin embargo, la participación de los usuarios ha sido muy baja. Según un informe de CNBC, menos del 1% de los suscriptores juega regularmente.
Aunque esta cifra parece haber influido en la decisión de reducir su catálogo, diversos analistas coinciden en que no se trata necesariamente de un abandono, sino de un redireccionamiento. La empresa podría estar buscando concentrar sus esfuerzos en juegos que generen mayor impacto, con el objetivo de optimizar recursos y mejorar la experiencia de los jugadores que sí interactúan con la plataforma.
LA FRAGILIDAD DEL CONTENIDO INTERACTIVO EN STREAMING
A diferencia de las películas o series, los videojuegos requieren actualizaciones constantes, mantenimiento y servidores activos. Esto hace que el costo de mantenerlos sea significativamente más alto.
La retirada de los 21 títulos resalta una realidad poco discutida: los videojuegos en servicios de suscripción están sujetos a condiciones muy distintas que pueden afectar la disponibilidad a largo plazo.
Pese a este ajuste, Netflix aún conserva más de 80 juegos activos y sigue trabajando en nuevos desarrollos a través de sus estudios internos. También se ha especulado con la posibilidad de que explore otros formatos, como el juego en la nube o la integración con televisores inteligentes y consolas, aunque por ahora su oferta se limita a dispositivos móviles.
UN FUTURO MÁS SELECTIVO PARA NETFLIX EN EL MUNDO GAMING
Lo que deja claro esta movida es que Netflix no abandona el mundo de los videojuegos, pero sí ajusta sus expectativas. En un mercado altamente competitivo, con actores como Microsoft, Apple y Amazon peleando por su lugar, la plataforma parece dispuesta a seguir explorando, pero de forma más medida y estratégica.
La compañía ha manifestado en repetidas ocasiones que ve los videojuegos como una extensión natural de su ecosistema, una forma de mantener a los usuarios más tiempo dentro de su plataforma.
La gran incógnita es si logrará consolidarse como un referente en este ámbito o si su apuesta por los videojuegos terminará siendo solo un experimento temporal.