La ‘Helicobacter pylori’ sobrevivía al ácido estomacal debido a una enzima; ahora tienes un aliado que ayuda desde el primer día
Por: Edel Osuna
Si cada vez que comes o bebes sientes que un ardor te corre por el esófago y te quema hasta la garganta, eso es acidez, pero si además de ello sufres de dolor y sangre en heces, eso es una úlcera.
Ambos padecimientos son causados no por los alimentos, sino por una bacteria llamada Helicobacter pylori (H. pylori), una infección que a nivel mundial está convertida en un flagelo y desafío para la salud estomacal.
Es una bacteria en forma espiral, la cual sobrevive al ácido del estómago gracias a la producción de ureasa, una enzima que transforma la urea en amoníaco y neutraliza el ácido localmente; además, está asociada con una simple gastritis, hasta úlceras y en casos crónicos hasta cáncer gástrico.
Y aunque existen tratamientos medicos tradicionales, como los antibióticos, la realidad es que esta ha desarrollado Resistencia, por lo que cada día se vuelve más difícil combatirla, por lo que la ciencia médica busca opciones efectivas para combatirla.
LA PROMESA VERDE LLAMADAS BRÓCOLI Y SULFORAFANO
La investigación para combatir este “bicho” no es algo nuevo, pues desde hace años se efectúan estudios para encontrar tratamientos o alternativas alimenticias para combatirlo, y se descubrió que hay una planta alimenticia que es ideal para hacerle frente: el brócoli, una delicia verde cuyos brotes están llenos de sulforafano.
Y cómo no se convierte en una promesa contra la H. pilori, si el brócoli es un vegetal crucífero reconocido por sus propiedades nutritivas; además, está cargado de vitaminas, minerales y glucosinolatos que, cuando el organismo los procesa, generan bioactivos como el sulforafano, que ha demostrado amplia acción antimicrobiana contra varias cepas de la Helicobacter pylori.
Y cómo no convertirse en el “terror” de esta bacteria, si el sulforafano es un fitocompuesto que en varios estudios tanto in vitro, como in vivo demostró que inhibe y hasta erradica distintas cepas de la H. pylori, aunque sean farmacorresistentes, pues interfiere tanto en los procesos bacterianos esenciales, así como en la capacidad de respuesta inflamatoria en la mucosa gástrica.
Pese a que se requieren estudios más amplios, algunos ensayos han demostrado que la ingesta diaria de brotes de brócolu, altos en solforafano, disminuiría la bacteria tempranamente, hallazgos muy esperanzadores para ayudar la salud gástrica.
Ahora que si vas a añadir a tu dieta el brócoli, la recomendación, en caso de que sea maduro, lo cocines al vapor (3 a 5 minutos), salteado o crudo; sin embargo, la forma más recomendable es en brotes, ya que los antioxidants del sulforafano combaten el estrés oxidativo y crea un ambiente desfavorable para la H. pylori y, en consecuencia, para combatir gastritis y úlceras.