Esta es la hora ideal para regar las plantas en época de calor y qué beneficios tiene

Con solo ajustar tu horario de riego podrás tener plantas verdes, sanas y fuertes durante todo el verano, sin desperdiciar agua ni gastar de más

Por: Marcela Islas

Tener plantas saludables y un jardín siempre verde es el sueño de cualquiera que ame la jardinería. Sin embargo, lograrlo en verano puede ser complicado si no se cuida un detalle clave: el horario del riego.

¿CUÁL ES EL MEJOR HORARIO PARA REGAR TU JARDÍN?

Lo ideal es regar entre las 5:00 y las 7:00 de la mañana, pues a esa hora, el suelo aún conserva la frescura de la noche y la temperatura del ambiente es más baja. Además, a esta hora es posible que el agua llegue bien a las raíces y no se evapore tan rápido como sucedería al mediodía.

¿POR QUÉ ES IMPORTANTE REGAR LAS PLANTAS EN LA HORA ADECUADA?

Algunos de los beneficios que se obtienen de regar las plantas a la hora indicada son los siguientes:

  • Mejor absorción del agua. Cuando riegas temprano, las raíces aprovechan casi toda el agua que reciben. La humedad se mantiene por más tiempo en la tierra, hidratando profundamente y esto ayuda a que la planta esté preparada para soportar el calor intenso del día.
  • Evitas daños y quemaduras. Si riegas al mediodía, el agua sobre las hojas actúa como lupa con el sol y puede quemarlas. Además, se pierde mucha agua por evaporación cuando el sol está fuerte. Por eso, regar cuando todavía hay sombra natural protege a tus plantas.
  • Menos hongos y enfermedades. Regar por la mañana permite que las hojas se sequen durante el día. De lo contrario, si lo haces en la noche, la humedad se queda estancada y aparecen hongos y moho con facilidad.

¿QUÉ PASA SI NO SE PUEDE REGAR TEMPRANO LAS PLANTAS?

La segunda mejor opción es regar al atardecer, cuando el sol ya no pega directo. Aun así, ten cuidado de no mojar demasiado las hojas: enfoca el agua en la base de la planta y evita en lo posible regar de noche, para no dejar humedad toda la madrugada.

Regar a la hora correcta es una técnica sencilla, económica y ecológica. Con solo ajustar tu horario de riego podrás tener plantas verdes, sanas y fuertes durante todo el verano, sin desperdiciar agua ni gastar de más. ¡Tu jardín te lo agradecerá!