La idea es reducir al mínimo lo que guardas y darle a cada objeto un lugar único, logrando que tu espacio se vea más ligero, funcional y armónico
Por: Marcela Islas
Si estás pensando en aprovechar el fin de semana de temporada de lluvias y tiempo libre para poner en orden tu armario, el método KonMari, creado por la japonesa Marie Kondo, puede ser la mejor inspiración.
Esta experta en organización, autora del bestseller La magia del orden, transformó su pasión de infancia por ordenar en una filosofía de vida que hoy millones de personas aplican en sus hogares.
¿QUÉ ES EL MÉTODO KONMARI?
Su premisa es sencilla: quédate solo con aquello que realmente te hace feliz y despídete, con gratitud, de lo que ya no necesitas.
El sistema se basa en dos mandamientos esenciales: descartar y doblar en vertical. La idea es reducir al mínimo lo que guardas y darle a cada prenda o objeto un lugar único, logrando que tu espacio se vea más ligero, funcional y armónico.
Según Kondo, el orden no es únicamente un acto práctico: también es un ejercicio de paz mental y emocional que puede ayudarte a clarificar tus prioridades y hasta replantear tu estilo de vida.
10 PASOS PARA ORDENAR TU ARMARIO CON EL MÉTODO KONMARI
- Comprométete a ordenar. Establece el objetivo de terminar tu armario en estos dos días, sin distracciones.
- Vacía todo el armario. Coloca la ropa en un solo lugar (cama o mesa) para ver realmente cuánto tienes.
- Clasifica por categorías. Comienza con camisetas, luego pantalones, vestidos, chaquetas, accesorios, etc.
- Toca cada prenda y pregúntate “¿Me hace feliz?”. Si la respuesta es no, agradécele y despídete.
- Descarta lo que no usas. No guardes “por si acaso” ni conviertas ropa que no te gusta en pijama.
- Dobla en vertical. Organiza camisetas, pantalones y ropa interior de manera que se mantengan de pie en los cajones.
- Cuelga solo lo necesario. Deja en perchas prendas delicadas o estructuradas (blusas, trajes, chaquetas).
- Agrupa por peso visual. Coloca lo más pesado a la izquierda (abrigos, pantalones) y lo más ligero a la derecha.
- Evita el exceso de almacenamiento extra. Usa tus cajones y estantes sin complicarte con demasiados contenedores.
- Disfruta del resultado. Contempla tu armario y reconoce la ligereza de tener solo lo que te aporta alegría.
Con este proceso, lo habitual es quedarse con un tercio de la ropa inicial. El resultado no es solo un armario más organizado, sino una sensación de claridad mental y emocional. Como dice Marie Kondo, ordenar es también un acto de transformación personal.