Tras el éxito inesperado de PS Portal, la compañía japonesa ha decidido retomar el camino iniciado por PSP y PS Vita
Por: Brayam Chávez
Sony está preparando su regreso al mercado de consolas portátiles, y esta vez lo hace con una apuesta ambiciosa que podría competir directamente con dispositivos como la Nintendo Switch 2 o la Steam Deck.
Tras el éxito inesperado de PlayStation Portal, la compañía japonesa ha decidido retomar el camino iniciado por PSP y PS Vita, buscando nuevamente un lugar en un terreno que, hasta hace poco, parecía exclusivo de Nintendo y los nuevos “PCs de bolsillo”.
SONY Y SU HISTORIA EN EL TERRENO PORTÁTIL
Todo comenzó en 2004 con la PlayStation Portable, mejor conocida como PSP, una consola que ofrecía gráficos avanzados, funciones multimedia y títulos que dejaron huella. Con más de 80 millones de unidades vendidas, su éxito fue considerable, aunque la piratería y la falta de apoyo externo acabaron afectando el desempeño a largo plazo.
Luego llegó PS Vita en 2011, con especificaciones técnicas avanzadas y un diseño muy moderno para su época. Aunque su propuesta fue potente, la falta de respaldo por parte de Sony y grandes estudios impidió que despegara del todo en occidente. Aun así, fue muy valorada en Japón y por el público indie.
UNA NUEVA CONSOLA PORTÁTIL, PARALELA A PS6
Fue a finales de 2024 cuando se filtró que Sony había iniciado el desarrollo de su próxima consola portátil. Este proyecto, conocido de forma preliminar como “PS5 portátil”, se desarrolla de forma paralela a la futura PlayStation 6, con la que compartiría algunas tecnologías clave.
Los rumores iniciales hablaban de una potencia similar a la PS4 Pro, aunque con capacidad para reproducir juegos de PS5 mediante streaming. Sin embargo, fuentes confiables aseguran que esta nueva portátil tendrá hardware propio, aunque con un enfoque más eficiente y optimizado para el formato portátil.
Potencia y arquitectura interna
Sony ha vuelto a confiar en AMD para los componentes internos de esta nueva consola. La CPU estará basada en la arquitectura ZEN 5, mientras que la GPU utilizará una tecnología híbrida denominada UDNA, superior incluso a la RDNA 3.5 que usa ROG Ally.
Este chip, fabricado en un proceso de 3 nm, tendrá un consumo estimado de 15 W y contará con soporte para reescalado por inteligencia artificial, lo que promete una mejora visual notable sin sacrificar rendimiento. A nivel de memoria, incluirá 16 GB de RAM LPDDR5X y una innovadora caché interna que ayudará a compensar su menor ancho de banda frente a PS5.
Diseño, batería y capacidad de almacenamiento
La nueva PlayStation portátil será totalmente digital, siguiendo la línea marcada por PS Portal y PS5 Pro. Incluirá una pantalla de al menos 8 pulgadas, mandos integrados con tecnología DualSense y una batería estimada entre 40 y 50 Wh, lo que debería garantizar entre 3 y 6 horas de autonomía, dependiendo del uso.
En cuanto a almacenamiento, se espera que incorpore un SSD NVMe de al menos 1 TB y ranura para tarjetas microSD de alta velocidad, permitiendo así una experiencia fluida y sin tiempos de carga excesivos.
¿QUÉ JUEGOS PODREMOS DISFRUTAR?
Una de las grandes promesas de esta nueva consola es la posibilidad de jugar títulos de PS5 en formato portátil. Aunque no ofrecerá el mismo rendimiento que la consola de sobremesa, se espera compatibilidad plena con el catálogo actual, especialmente gracias a parches de optimización que prepararán los desarrolladores.
Juegos como Marvel's Spider-Man 2, Horizon Forbidden West o God of War Ragnarok estarían disponibles desde el inicio. Además, tendrá capacidad más que suficiente para ejecutar títulos de PS4 sin inconvenientes, incluso con mejoras visuales.
Por ahora, los títulos de PS6 quedarían fuera del alcance directo de esta portátil, aunque Sony estaría considerando permitir su acceso vía streaming, como ocurre con PS Portal.
FECHA DE LANZAMIENTO Y PRECIO ESTIMADO
El dispositivo todavía se encuentra en una fase temprana de desarrollo. Si todo avanza como se espera, su llegada podría concretarse en 2028, poco después del lanzamiento de la esperada PS6.
En cuanto al precio, los expertos creen que será difícil mantenerlo por debajo de los 400 euros. La cifra más realista se encuentra entre los 500 y los 700 euros, posicionándola como una consola premium dentro del mercado portátil, pero más accesible que una consola de sobremesa de nueva generación.