La política debería ser para desarmar a la población y entrar a transitar justamente a la pacificación armónica
Por: Leova Peralta
Tras la aprobación en comisiones dentro del Congreso de la Unión para avalar la reforma de la Ley Federal de armas de fuego y explosivos, la Unión de Usuarios, en voz de dirigente Ignacio Peinado Luna, manifestó que tienen alta preocupación de que se haya permitido darle cause a que el Gobierno Federal autorice a organismos públicos la aportación de armas de fuego.
Señaló que esta acción deja abierto un estado de preocupación y vulnerabilidad ante el hecho de que en una solicitud colectiva pudiera ser por ejemplo la Comisión Federal de Electricidad o cualquier otra dependencia pública del Gobierno Federal, quien se respalde con esta ley si a su juicio considera que es necesario armar a sus empleados.
“Pues es preocupante que el Estado mexicano pueda estar armando a las dependencias públicas del Estado y cuando debe, en todo caso, estar salvaguardando las entradas y el solo hecho de representar al Estado mexicano, ya actúan con un poder para poder violentar de diferentes maneras y el hecho de estar tratando el tema de armarlos, pues es mucho muy preocupante”, opinó peinado Luna.
El dirigente de la Unión de Usuarios, indicó que la política debería ser para desarmar a la población y entrar a transitar justamente a la pacificación armónica a través de la cultura de paz, de diferentes mecanismos y no estar abriendo el mercado para que cualquier funcionario público o dependencia del Gobierno Federal pueda hacer la solicitud colectiva y armar a sus empleados.
“No tengo duda, es evidente, si ya lamentablemente hay áreas y se debiera de combatir a lo que es todo el tema de la delincuencia organizada con inteligencia para desarmarlos y ahora armar al funcionario público, pues esto va a ser como el viejo oeste, hoy se empieza, pero puede desencadenar en el mediano o largo tiempo donde todo mundo se puede armar”, abundó Ignacio Peinado Luna.
Añadió, que esta reforma lo que está haciendo es reconocer entre líneas que el Estado mexicano emite un permiso para que la ciudadanía se arme porque ya no puede defender, es decir, que ya no se cuenta con la capacidad para garantizar la seguridad que le corresponde.