Por: Eduardo Sánchez
En un comunicado a la opinión pública, sostuvo que el joven -que fue expulsado del plantel en mayo por “conductas inapropiadas” contra una alumna y que actualmente está vinculado a proceso- fue objeto de represión por las autoridades del Creson, tras quejarse por la tardanza de apoyos para los estudiantes y para el mejoramiento de la infraestructura de la escuela.
“Lo que sí hicieron es usurpar las funciones de las autoridades competentes y, cual juez y parte, decidieron hostigar a mi hijo, presionándolo para que se declarara culpable, además de que le propusieron que mejor recogiera sus papeles y se largara a otra escuela”, añadió.
Asimismo, Espinoza Zayas recordó que el artículo tercero constitucional reconoce el derecho a la educación en nuestro país, pero Luis Francisco Avilés Torres, director de El Quinto; Pascual López Ayala, subdirector administrativo, y Mauro Sánchez Ibarra, coordinador de Servicios Asistenciales, “firmaron sin fundamento alguno la baja definitiva de mi hijo Samuel”.
“Tengo una pregunta que hacer a los directivos: “¿Cuántos estudiantes han dado de baja sin averiguación alguna y con la venia del Creson?”, dijo al reiterar que no van a permitir injusticias.
“En Ayotzinapa nos faltan 43; en El Quinto nos falta Samuel”, concluye Adolfo Espinoza en su comunicado.
Cabe agregar que el caso del ex alumno está en juicio y en octubre próximo se realizará la tercera audiencia, con respecto a la demanda de acoso sexual interpuesta por los padres de la joven.