El Chinal: El pequeño lugar de Sonora que se considera la capital del dogo

Los verdaderos maestros del dogo no son de estas grandes ciudades como Obregón o Hermosillo, sino de un rincón casi oculto del sur sonorense

Por: Marcela Islas

Por décadas, en Sonora ha existido una eterna discusión que divide amistosamente a los paladares: ¿Dónde se preparan los mejores dogos del estado, en Hermosillo o en Ciudad Obregón?

Esta rivalidad gastronómica entre las principales ciudades de Sonora ha dado pie a infinidad de debates, memes y hasta investigaciones callejeras.

Pero hay un dato poco conocido que podría cambiarlo todo: los verdaderos maestros del dogo no son de estas grandes ciudades, sino de un rincón casi oculto del sur sonorense El Chinal, una pequeña congregación del municipio de Álamos.

LOS VERDADEROS REYES DEL DOGO

El creador de contenido El Gallo Negro, originario de Obregón, pero con años de experiencia en los medios hermosillenses, lo reveló sin filtros en un video reciente junto a Ismael Valenzuela. Entre bromas y verdades, dejó caer una bomba:

“Esos vatos están camuflajeados en Obregón y en Hermosillo, no te van a decir que son del Chinal a menos que tú los saques a flote”. Y no es para menos: los dogueros chinaleños se han ganado el respeto con pura técnica y sabor.

EL CHINAL: MÁS QUE UN PUEBLO, UNA LEYENDA CULINARIA

Pero ¿qué es El Chinal y por qué tiene tanto peso en el mundo del dogo?

Ubicado en el municipio de Álamos, al sur del estado, El Chinal es una comunidad pequeña en tamaño pero gigante en tradición. Aunque muchas personas lo pasan por alto en los mapas, entre los conocedores es sinónimo de excelencia en la preparación de dogos.

Esta localidad ha sido durante generaciones la cuna de numerosos vendedores ambulantes que hoy se reparten por todo Sonora —y más allá— poniendo en alto su sazón y su apellido. La historia de El Chinal con los dogos no es casual.

Ahí, preparar este platillo no es un oficio, es una herencia. Se dice en tono de broma, pero con una pizca de verdad, que "en Hermosillo nacemos con el asador en las manos, pero en El Chinal nacen sabiendo hacer dogos".

Desde temprana edad, los jóvenes aprenden los secretos de la salchicha envuelta, el pan al vapor perfecto, las combinaciones de salsas, y ese "algo" que no se enseña, solo se hereda.

"LA UNIVERSIDAD DEL DOGO" EN SONORA

No solo El Gallo Negro ha puesto el foco en esta comunidad. Otros creadores digitales como Néstor Portillo han viajado hasta El Chinal para vivir la experiencia de probar un dogo hecho por manos locales. Y no salieron decepcionados.

Al contrario, salieron convencidos de que ahí se encuentra lo más cercano a una “universidad” del dogo sonorense. Un lugar donde se forma a los mejores en el arte de esta delicia callejera.

“Los chinaleños están en muchas ciudades de Sonora, vendiendo dogos, creo que hasta en Sinaloa”, dice uno de los comentarios más repetidos por seguidores.

Y es que en cada esquina donde hay un dogo espectacular, hay una buena probabilidad de que detrás del carrito esté un chinaleño con recetas heredadas y orgullo bien puesto.

Muchos de estos expertos cocineros están “camuflajeados”. Se establecen en Hermosillo, Obregón u otras ciudades, sin hacer mucho ruido sobre su origen. Pero si te tomas el tiempo de preguntar, tal vez descubras que ese dogo que tanto amas, el de la fila larga, el que nunca falla… viene de El Chinal.

Así que la próxima vez que pidas un dogo, haz la prueba: pregúntale al que lo preparó de dónde es. Tal vez no sea de Hermosillo ni de Obregón, sino de un pequeño lugar que ha cambiado el rumbo de los sabores callejeros en Sonora: El Chinal, la verdadera cuna del dogo.