Por: Eduardo Sánchez
Por: Raúl Armenta Rincón
La quema de gavilla ocurrió a unos 200 metros de la carretera, a la entrada norte de Etchojoa, a donde acudieron elementos del Cuerpo de Bomberos.
Ibarra Borbón consideró que los alcaldes, la Secretaría de Salud y otras instancias involucradas “no quieren tocar a los productores poderosos, tienen que ver mucho las influencias e intereses.
“El problema, y no es justo, es que sigue la contaminación del medio ambiente y de daños a la salud de la población, en donde muchas personas sufren alergias, conjuntivitis y otros padecimientos que, incluso, derivan más tarde en infartos”, sostuvo.
Lamentó que muchos productores continúen incurriendo en dicha práctica, aun cuando pueden darle otros fines a la gavilla, como la elaboración de pacas para el ganado. “No lo hacen y optan por la salida más fácil y cómoda, pero sin pensar en los daños que causan a la ecología y la salud de la gente”.
Asimismo, afirmó que las sanciones establecidas para la quema de gavilla son muy bajas, por lo que los ayuntamientos y el Congreso del Estado deben promover la actualización de estas legislaciones que ya quedaron rebasadas.