Por: Eduardo Sánchez
A la joven mujer, con un embarazo de 8 meses, la contactaron a través de Facebook; su confianza en una desconocida la llevó a la muerte
Juli soñaba con ser madre, pero no podía. En su oscura mente fraguó un siniestro plan para consumar su anhelo: robarlo.
Mónica Segura, de 22 años de edad, estaba en la flor de la vida y vivía la maravillosa experiencia de gestar en su vientre una nueva vida; sin embargo, una mente siniestra urdía en las sombras el modo de apoderarse de su bebé y de quitarla de la existencia.
Cecilia, madre de Mónica, quien vive en la colonia Jardines de la Silla, en el municipio Juárez, esperaba el regreso de su hija, pero al ver que no volvía, interpuso una denuncia por su desaparición, por lo que la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) de Nuevo León abrió una carpeta de investigación.
Las pesquisas llevaron a elementos del Centro de Operaciones Estratégicas a una veterinaria en el centro, donde luego de una intensa búsqueda encontraron en un estanque el cadáver putrefacto de la joven madre, pero sin su bebé.
La chica había sido secuestrada el 1 de junio, día en que se citó con una mujer que se ofreció a darle ropita para el bebé y ayuda monetaria.
La FGJE informó que la mañana de este sábado 27 de junio lograron la detención de Juli, con residencia en la colonia Gardenia, y recuperaron a la bebé de Mónica, quien alumbró en la veterinaria donde fue plagiada por la desquiciada mujer.
En el lugar fueron encontradas una incubadora, armas y drogas, así como manchas de sangre.
EL ENGAÑO Y SU MUERTE
Para conseguir a toda costa a “su” bebé, Juli ideó un perfil falso en Facebook bajo el nombre de “Ana Paula Covarrubias Contreras” y publicó en un grupo que tenía ropita para bebé que deseaba regalar. Mónica se encontraba a pocos de dar a luz y empezó a buscar prendas para recién nacido, por lo que cuando vio la publicación de “Ana Paula”, la contactó.
“Ana Paula” la citó en el centro para, además de darle la ropita, ofrecerle su ayuda económica. Cuando estuvieron juntas, su presunta homicida la condujo hasta una veterinaria, donde Mónica dio a luz y fue asesinada.
Con el paso de los días, Juli y su pareja, Milo, con fotos daban a conocer en redes sociales el nacimiento de su pequeña Luciana, que en realidad era la pequeñita de Mónica. El hecho causó extrañeza entre sus vecinos, que Juli hubiese dado a luz, pues jamás manifestó signos de embarazo.
El cuerpo de Mónica fue trasladado a la morgue del Hospital Universitario para, luego de la autopsia de rigor, a fin de determinar las causas de su muerte y de estudios genéticos, entregarlo a su familia; en tanto, su hijita también estará en espera de, tras análisis de ADN, ser restituida a los deudos de su joven madre, cuyo único error fue confiar en una desconocida.