Por: Eduardo Sánchez
El Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) aplicado a las gasolinas es un gravamen que se aplica todos los meses para lograr las metas de recaudación del gobierno.
El IEPS para la gasolina magna (menor a 82 octanos) subirá de $4.81 a $4.95, es decir 14 centavos más.
Para la gasolina premium (mayor a 91 octanos) se elevará de $4.06 a $4.18, un incremento de 12 centavos.
El impuesto al diésel pasará de $5.28 a $5.44, un incremento de 16 centavos.
El incremento para el IEPS no tiene por qué representar un aumento directo al precio para el consumidor, debido a que los distribuidores deberán de ajustar sus precios y así ofrecer el precio más competitivo de acuerdo a libre mercado.
El jefe del Ejecutivo federal atribuyó estos resultados a su política de austeridad, al manejo responsable de las finanzas y al destierro de la corrupción de la Hacienda pública.