Por: Eduardo Sánchez
En su segundo día de manifestación, los extranjeros instalaron un campamento en la explanada exterior del inmueble del INM.
Los inconformes insistieron en que su objetivo no es quedarse en México, sin embargo, las medidas de contención del Gobierno federal los mantiene varados en la frontera sur.
Algunos incluso llevan seis meses solicitando una estancia legal ante el INM y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, pero sin resolución de sus trámites.
Los migrantes señalaron que continuarán su protesta hasta que las autoridades atiendan su petición.