Por: Eduardo Sánchez
"Un cambio definitivo por la mujer" es el título del editorial de esta semana, el cual resalta la "inaceptable" violencia contra ellas, su grito de "ahora o nunca", al igual que la voz silenciada de las víctimas.
El artículo subraya que los feminicidios han provocado en la sociedad mexicana dolor, amargura, indignación, e impotencia, aunque también enojo y deseos de venganza, por lo que pide que ante el enojo, "el impulso de pagar mal con mal", se escuche y actúe en pro de una cultura de justicia, esperanza y paz.
La iglesia expuso que su participación "en la misión de pacificación" es a través de sus Centros de Escucha y de atención a las víctimas.
"La Iglesia tiene que asumir su función y su compromiso especial ante el reto de proyectar la dignidad de las mujeres en todos los ámbitos de la sociedad, comenzando por las que trabajan en esta Arquidiócesis de México", asume la iglesia.
El función que cumplen las mujeres en la sociedad va más allá de la comunidad o las instituciones, resalta el artículo, sino del papel trascendente para la humanidad: "amar con la ternura que sólo ellas poseen y que ha hecho del mundo, a través de la historia, un lugar más amable".
"Hacemos votos para que este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, sea un impulso para subrayar la dignidad de la mujer, para escuchar su reclamo, defender el ejercicio pleno de su libertad de expresión y de manifestación contra la injusticia y en defensa de su propia vida", concluye el texto.