Aunque su producción se detuvo hace más de una década, su popularidad no ha disminuido, gracias a su bajo costo de mantenimiento y resistencia
Por: Brayam Chávez
En 2025, el Chevy Pop continúa siendo uno de los autos más buscados dentro del mercado de los vehículos compactos de segunda mano en México.
Aunque su producción se detuvo hace más de una década, su popularidad no ha disminuido. Muchos conductores siguen eligiéndolo por su bajo costo de mantenimiento, su resistencia y su accesibilidad económica.
CHEVY POP EN LA ACTUALIDAD
Actualmente, el precio de un Chevy Pop varía dependiendo del estado físico y mecánico del vehículo, así como del año de fabricación y el kilometraje. En promedio, el costo de un Chevy Pop en 2025 oscila entre los 25,000 y 45,000 pesos mexicanos. Los modelos mejor cuidados o con modificaciones adicionales pueden alcanzar precios un poco más altos, aunque siguen siendo accesibles en comparación con autos más modernos.
A pesar de no contar con la tecnología de los vehículos actuales, el Chevy Pop mantiene su valor por varias razones. Una de las principales es su sencillez mecánica, lo cual facilita las reparaciones y reduce los costos de mantenimiento. Además, hay una amplia disponibilidad de refacciones, tanto originales como genéricas, que permiten alargar la vida útil del auto sin complicaciones.
Otro punto a favor es su rendimiento de combustible. Aunque no es tan eficiente como los autos híbridos o eléctricos, el Chevy Pop ofrece un consumo moderado que lo hace ideal para trayectos urbanos y para quienes buscan un auto funcional sin hacer una gran inversión.
También es importante destacar su tamaño compacto, que lo convierte en un excelente aliado para la ciudad, ya que facilita el estacionamiento y la conducción en espacios reducidos.
En conclusión, en un mercado donde los autos nuevos pueden superar fácilmente los 250,000 pesos, el Chevy Pop se mantiene como una alternativa sólida para estudiantes, trabajadores o familias que necesitan un vehículo confiable sin comprometer sus finanzas. Aunque no es el más moderno ni el más equipado, su resistencia, bajo costo y facilidad de mantenimiento siguen dándole un lugar especial en las calles mexicanas.