Reacomodo en gabinete

Por: Eduardo Sánchez

No quisiera decirte, amable lector, te lo dije, pero la verdad es que sí te lo dije la semana pasada: que pronto Célida López Cárdenas habría de dar una sacudida al árbol de su gabinete y en primer lugar se iría de la Secretaría del Ayuntamiento de Hermosillo, don Nicolás Alfredo Gómez Sarabia.

Y es que ese funcionario ya ha causado muchos dolores de cabeza a la Alcaldesa, empecinado como está en hacer ingresar a Comunicación Social del Congreso del Estado a Jesús Olivas.

Ha sido tal su obsesión, que hasta sus labores en la Comuna ha descuidado, según se ha sabido, y la Presidenta Municipal ha tenido que resolver directamente algunos asuntos importantes.

Pero aparentemente López Cárdenas ha decidido también darle al funcionario otra oportunidad y posiblemente vaya a ser propuesto este día como nuevo Director de Agua, en vez de María Victoria Olavarrieta Carmona.

Y para que vean que va en serio la dama, anuncian a Daniel Sánchez González, actual Oficial Mayor, como próximo Tesorero, y Joaquín Rodríguez Véjar, a la Secretaría del Ayuntamiento.

A ver si los pronósticos se cumplen.

SECUESTRO EN EL IEE

Qué poderosos se están viendo los consejeros electorales Ana Maribel Salcido Jashimoto, Daniel Núñez Santos, Daniel Rodarte Ramírez y Arturo Kitazawa Tostado, quienes supuestamente quieren despedir a buena parte del personal del Instituto Estatal Electoral.

Y para que haya presión han decidido "congelar" los pagos de las quincenas, según voces al interior del Instituto, que ven cómo prácticamente los han cesado porque no les pagan, pero son esas cuatro personas las que tienen estrangulado al IEE, una situación que no habían visto jamás en esa institución.

Los trabajadores quieren saber, ante todo, cómo es que elaboraron la lista de 40 a despedir, sobre todo porque son personas con mucha experiencia en la organización de las elecciones y ahora sólo porque a estos cuatro consejeros se les antoja, van a ser despedidas, lo cual consideran ilegal y van a utilizar abogado para defenderse.

Este tipo de acosos no van con la personalidad de, se supone, personas que deben ser justas e imparciales, como se debe en los procesos electorales, pero sobre todo en el trato a sus compañeros de trabajo, pues la prepotencia de que han hecho gala no los lleva a nada bueno.

¿Y LA GUARDIA, APÁ?

Acá entre nos y en confianza, les voy a decir que sinceramente la mentada Guardia Nacional no ha reportado algo digno de llevar a casa.

A muchos ciudadanos les da desconfianza que los elementos del Ejército que ya estaban en la región lleven solamente sobrepuesta una tela con las siglas GN pero con las mismas estrategias de siempre, al menos es lo que se ha visto en Cajeme, en donde los hechos de sangre no paran.

Y vuelven a repetir las autoridades, como cada vez que hay sucesos sangrientos de gran magnitud, que se van a reforzar los operativos y que ahora sí habrá de utilizarse la inteligencia para dar con los malos, pero la verdad todo es mediático, sin acciones de respaldo.

Se festina, por ejemplo, que encontraron en Obregón a 13 sicarios o en Sahuaripa autos blindados, pero no es porque hayan hecho labores de investigación a fondo sino porque la misma ciudadanía ha denunciado los lugares y los mandos llegan a encontrar lo que el pueblo ya sabía.

Urge, pues, que ahora sí se pongan a trabajar, ya que no se explica cómo un delincuente de cuello ancho andaba hasta en restaurantes de Hermosillo y en vez de la "inteligencia" de la Policía lo ubicará, lo encontraron los sabuesos de los grupos contrarios mientras la mayoría de los funcionarios disfrutaba de sus vacaciones.

En fin, ya veremos si ahora si actuarán en serio o de plano siguen actuando como si la virgen les hablara para no meterse en problemas.

OPACAN A TRANSPARENCIA

Como hasta el momento la única función que desempeña José Luis Delgado López, jefe de la oficina del alcalde de Cajeme, Sergio Pablo Mariscal Alvarado, es la de impedir que algunos regidores utilicen el baño del Alcalde, el funcionario ha optado por dirigir el área de Transparencia.

Y es que, según dicen desde adentro de esa oficina, muchos de los documentos que deben entregarse a la población que los solicita se atoran en el escritorio de Delgado López, quien se ha atribuido la facultad de decidir qué solicitudes se deben o no entregar, como por ejemplo los de algunos contratos que mantiene  el Ayuntamiento con ciertas empresas.

Esa información que fue solicitada por un ciudadano y aunque ya se encuentra lista,  Delgado López ha optado por ser él quien autorice o no la entrega de esos documentos.