Aunque no están asociadas directamente a bancos, las tarjetas de crédito emitidas por tiendas departamentales también generan registros detallados
Por: Jhoanna Ontiveros Peraza
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha comenzado a monitorear con mayor rigor las operaciones financieras de los contribuyentes en México, y no solo se enfoca en cuentas bancarias tradicionales.
Ahora también observa de cerca los movimientos que se realizan con tarjetas de crédito emitidas por tiendas departamentales como Coppel, Liverpool y Suburbia, que, aunque no están asociadas directamente a bancos, sí generan registros detallados de consumo.
¿EL SAT PUEDE REVISAR LAS COMPRAS EN TIENDAS DEPARTAMENTALES?
Los gastos que se realicen con tarjetas departamentales quedan registrados a nombre del titular, por lo que si una persona declara ganar 10 mil pesos mensuales, pero sus compras superan los 25 mil pesos en ese mismo periodo, podría ser requerida para justificar el origen del dinero adicional.
Según las autoridades fiscales, este tipo de discrepancias podrían interpretarse como ingresos no reportados, lo cual representa una irregularidad ante el fisco.
¿QUÉ PASA SI EL SAT DETECTA IRREGULARIDADES?
En caso de encontrar una discrepancia entre lo declarado y lo gastado, el SAT puede solicitar al contribuyente justificar el origen de los recursos utilizados. Si no se puede comprobar legalmente de dónde provino el dinero, se podrían aplicar:
- Multas que van del 15 al 70 por ciento sobre el monto no justificado.
- Recargos e intereses, conforme a lo estipulado en la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Código Fiscal de la Federación.
- En situaciones graves, incluso se puede iniciar un proceso penal por presunta defraudación fiscal.
¿CÓMO EVITAR PROBLEMAS CON EL SAT POR EL USO DE TARJETAS?
Para evitar sanciones, el SAT recomienda:
- Declarar correctamente todos los ingresos.
- No realizar compras que no se pueda justificar.
- Evitar compartir las tarjetas con otras personas.
- Guardar comprobantes y mantener un registro detallado de los gastos.
Las tarjetas departamentales pueden ser una herramienta útil para las compras y el financiamiento, pero su uso también implica una responsabilidad fiscal. Llevar un buen control y actuar con transparencia puede ahorrarte problemas legales y económicos en el futuro.