Por: Eduardo Sánchez
La industria artesanal no pierde chance y hace de cada personaje un gran negocio; hay figuras de políticos, superhéroes y del espectáculo
La vida está hecha de oportunidades y quienes saben sacarles provecho disfrutan enormidades de sus triunfos, y el medio del espectáculo, así como los personajes de dibujos animados se han convertido en fuente de ingresos.
Una de esas oportunidades es el mundo de las piñatas, que hacen de personajes, artículos para fiestas; los más conocidos son políticos y superhéroes; sin embargo, la farándula ha hecho su aporte, como el caso de Sarita Sosa, hija del desaparecido “Príncipe de la Canción”, José José.
Debido a lo ocurrido con sus hermanos mayores durante la muerte y funeral de su padre, la chica fue vista como malevola y la industria de la piñata la convirtió en uno de sus personajes más “queridos”, pues en cuanto sacaron la figura de la joven, se hizo viral y se vendió como pan caliente.
Lo mismo ha ocurrido ahora con Juan José Origel, periodista de espectáculos que recientemente se vio envuelto en un escándalo por una fotografía filtrada en la que aparecen las piernas de un hombre en un horno de cocina, además de la supuesta demanda en su contra por el joven Pablo Aldrete, de 24 años.
En esa imagen, “Pepillo” aparece vestido en una camiseta blanca, sin rasurar, y así justo fue elaborado en piñata, lo que al periodista de espectáculos le ha parecido sumamente divertido y hasta se ha dedicado a promocionarla.
“Ya está a la venta mi piñata. 700 pesos, y muy pronto saldrán las camisetas y los muñecos”, refirió.
Y aunque la polémica por las fotos y la demanda continúa, Origel prefiere no hacer fama a quien publicó las imágenes y asegura que su vida es privada, de nadie más, y agradeció a sus seguidores por el apoyo y los mensajes positivos que le envían.
“Más de 40 años me avalan, más de 40 años trabajando para ustedes, me dicen cosas tan bonitas”, puntualizó.